Cómo sanar tus relaciones con tu ego

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Jesús Lloret

Mentor Alquimia Evolutiva

En este post quiero hablarte cómo puedes beneficiarte de tu ego para tener unas relaciones sanas.

Antes de nada vamos a ver que es el ego y cómo funciona y que mecanismos utiliza en nuestra vida.

Al ego muchas veces de le llama el «falso yo». Está muy relacionado con nuestra personalidad, con nuestro carácter.

Siempre se dice que ego nos separa de nuestra esencia, se alimenta de nuestros miedos, bajas emociones y se nutre de bajas energías.

También se suele decir que provoca la comparación a los demás, que nos empequeñece o se emborracha de falsa autoestima, creyéndose más que los demás. 

Todo esto provoca que muchas veces vivamos como en una noria emocional, bajando o subiendo según las circunstancias externas.

Y lo peor es que nos identificamos totalmente con él.

La educación que recibimos desde pequeños promueve la separación y la individualidad, como si tuviéramos que luchar contra todo y todos para poder subsistir en la lucha de la vida.

Esto provoca tensión, estrés, ansiedad por querer ser o demostrar algo que realmente no somos.

El ego como ayuda especial

Pero sabes, realmente el ego no es tan malo, y menos nuestro enemigo a batir.

Aunque haya muchos autores que escriban y aseveren que es fundamental eliminar o reducir nuestro ego, es esencia eso es imposible.

El ego tiene una misión especial de ayuda para nosotros.

Espiritualmente hablando, el ego es una aliado de nuestra alma.

Espiritualmente hablando, el ego es una aliado de nuestra alma.

Y es así porque nos va sacando, y mostrando en nuestra vida, todas las sombras y partes oscuras de nuestra personalidad y creencias que nos limitan, para que le demos luz.

Si no tuviéramos ese “aliado” del ego no podríamos avanzar hasta la principal misión que todos tenemos en esta vida:

Reconocernos como parte del Todo.

Cuando reconoces que en esencia eres igual que quien temes, molesta o quizás odias, en ese momento recuperas el poder.

En ese momento puedes aceptar a las personas con amor.

Desde esa aceptación recuperas tu responsabilidad y tu poder de estar o dejar de estar con ellas si no te suma, pero lo haces desde el amor (hacia ti y hacia el otro) no desde el rencor, ira o rabia.

Resumiendo, tenemos un ego que puede tener dos significados siendo una sola su función: tu evolución.

Si alguien te chirría, observa dentro de ti que existe que chirría y que esa persona te está mostrando.

Al fin y al cabo todos somos espejos de los demás, y nuestro ego (y sus reacciones) nos ayuda a pulir nuestro diamante interno para despertar en la verdadera felicidad.

Espero que te haya inspirado y te sirva en tu evolución hacia tu felicidad.

Me encantará saber tu opinión al respecto, o saber cualquier duda que puedas tener. Así que si te apetece puedes responderme en los comentarios.

¡Te leo!

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